Como especialistas en reformas en San Sebastián de los Reyes, queremos hablarte de cómo aislar correctamente una pared del frío. Y es que, en una reforma o en una nueva obra, esta parte es fundamental para que la vivienda sea de calidad.
¿Cuál es el mejor material aislante térmico para una pared?
Lo cierto es que no existe “un mejor aislante térmico para paredes”, puesto que la elección de un aislante u otro (y hay muchos) dependerá de diferentes factores, como si la pared es húmeda o seca, si soportará peso o no, si necesitará una barrera de vapor…
No obstante, podemos indicarte los diferentes tipos de aislantes térmicos existentes y en qué casos son la mejor opción para aislar térmicamente una pared:
- Aislamiento térmico reflectante: esta opción se recomienda para los bajo techos, las buhardillas y la mayoría de las paredes. Se instalan con unas simples grapadoras y vienen muy bien para ahorrar espacio. Son muy ligeros y es uno de los aislantes más fáciles de instalar.
- Poliestireno expandido: el poliestireno expandido está disponible en varias densidades, y se instala mediante adhesivos. En algunas ocasiones, las variantes de mayor grosor y densidad también pueden utilizarse como aislantes exteriores. A su vez, este aislamiento exterior luego sirve como soporte para un enfoscado.
- Poliestireno obstruido: es el mismo material que el anterior, pero, en este caso, el grosor es mayor y su capacidad de aislamiento también. Es habitual que este material se utilice en las fachadas, en los suelos y en la tabiquería en general. Además, este material es muy resistente a la compresión y es totalmente impermeable.
- Espumas elastoméricas domésticas: son una buena opción para aislar pequeños huecos. Se trata de un material que se inyecta mediante pistola y se expande en el interior del hueco.
- Lanas minerales: por último, las lanas de roca o de fibra de vidrio sirven para aislar térmica y acústicamente. Su uso está aconsejado para suelos, tejados y fachadas ventiladas. No obstante, hay que instalarlas junto a una barrera al vapor, porque no son impermeables y dejan pasar el vapor.
Como puedes ver, aislar una pared del frío puede hacerse de muchas formas, y elegir una u otra dependerá de la situación concreta. No obstante, hay que hacerlo sí o sí, porque, de lo contrario, la vivienda no tendrá la máxima calidad… ¡Y eso sí que no puede ser!
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